Un grupo de investigadores protestando frente a Conicyt. Foto: Mario Pinto
El director (s) ejecutivo de Conicyt, Daniel Portales, anunció que
antes del 30 de marzo estarán resueltos los problemas con los
investigadores de Fondecyt que no han recibido sus dineros desde el año
pasado.
Los afectados por la situación protestaron este martes frente a las
oficinas de la institución exigiendo el pago de los fondos asignados,
que en el caso de quienes ganaron concursos de posdoctorado, alcanzan a
los 20 millones de pesos anuales.
“Estamos trabajando en horario reforzado de tal manera de llegar al
30 de marzo con la mayor cantidad de casos cerrados. Si eventualmente
llegase a producirse alguna situación puntal, esa información se le va a
presentar al Consejo de Fondecyt que es la instancia que está facultada
para extender este plazo máximo”, señala Portales.
El Consejo de Fondecyt confirmó que se reunirá el martes 22 para estudiar los problemas con la entrega de fondos.
Hasta ahora se han entregado el 50% de los recursos comprometidos y los casos pendientes alcanzan a los 280.
Desde Conicyt reconocen que los retrasos se han producido por
problemas de gestión, pero otros por la no entrega oportuna de
documentación de los interesados.
Por ejemplo, para la transferencia de recursos se debe proporcionar
una cuenta corriente, muchos no la tienen, o los extranjeros que deben
presentar visas de trabajo. También están los que no han cerrado
correctamente los procesos de becas anteriores para recibir las
transferencias.
“Hay personas que recién trajeron sus documentos el pasado viernes. Eso tampoco ha ayudado acelerar esto”, dice Portales.
A lo anterior, se suma que existe un grupo de 105 personas,
denominados “inhabilitados”, que no podían acceder a los recursos de
Conicyt porque se graduaron fuera de plazo. Para ellos se elaboró una
ley especial que recién entró en vigencia en febrero, por lo que el
plazo ha sido aún más acotado para entregarles los dineros.
Pese a ello, el directivo reconoce que la institución “tiene muchas cosas que mejorar” a nivel de gestión.
Francisco Brieva, ex presidente del Consejo de Conicyt, quien
renunció el año pasado, tras seis meses sin sueldo, explica que existen
varios nudos al interior de la institución. Por ejemplo, hay serios
problemas de organización, gobernanza y gestión. “Producto de
innumerables desatinos, improvisaciones e incompetencia, desde su
creación a la fecha, Conicyt no tiene la estructura administrativa y de
gestión adecuada a las tareas que una comunidad en investigación y
desarrollo, numerosa e informada, requiere hoy. Un ejemplo simple de
esas confusiones es lo ocurrido con el Presidente del Consejo y sus
remuneraciones”, señala.
Entre otros puntos críticos destaca la actual dependencia de Conicyt
del Ministerio de Educación, lo que a su juicio es un “anacronismo”; las
remuneraciones poco atractivas dentro de la administración del Estado
que se traducen “en una alta rotación del personal” y un soporte
informático de bajo nivel, “sorprendente para los tiempos”, advierte
Brieva.