Con cuatro establecimientos, la comuna chilota fue la que sumó más colegios municipales sobre 300 puntos promedio en el examen nacional. Son colegios rurales que están en pequeñas islas, donde hay sólo uno o dos profesores.
por J. Herrera y D. Muñoz - 17/04/2013 - 04:10
Una escuela rural de Quemchi, en la X Región, sorprendió el lunes
al tener el mejor promedio Simce entre los colegios municipales que
imparten 4º básico. Pero no sólo este plantel obtuvo resultados
destacados en esa comuna chilota: otros tres colegios municipales,
emplazados en pequeñas islas también lograron resultados destacados, y
promediaron más de 300 puntos en 4º básico. Un éxito, sólo comparable en
número, al registrado este año por Ñuñoa. Esta comuna capitalina sumó
cuatro establecimientos, incluido el República de Siria, con más de 300
puntos en la medición de 2º medio. De esta forma, estas dos comunas se
transformaron en las que más recintos públicos tienen con resultados por
sobre la barrera de los 300 puntos.
Profesor y director
José Rojas tiene 30 años de servicio, es uno de los dos profesores de la escuela rural Aucar y además es el director.
El colegio tiene 46 alumnos, los cuales se dividen en dos cursos: uno
que agrupa a los alumnos de 1º a 3º básico, y otro que reúne a quienes
están entre 4º y 6º básico.
Según cuenta el profesor, los 335 puntos que promediaron los siete
alumnos de 4º básico en el Simce “son en base al trabajo que estamos
realizando, específicamente con tres actores: profesores, alumnos y
apoderados”.
Rojas agrega que en las salas de clases se hace un trabajo
personalizado y además se está pendiente de que los alumnos vayan
avanzando a la par.
Otra de las áreas de trabajo es con los padres, a quienes se les
hacen talleres. “Algunos son de reforzamiento, porque muchos no tienen
la enseñanza media cumplida y quieren que les hagamos talleres para que
puedan reforzar a sus hijos en la casa”. La mayoría de los apoderados de
ese colegio trabajan en la agricultura o bien en las salmoneras de la
zona.
Otro de los factores que influye, dijo, es que “conocemos a las
familias, a los niños y su realidad, y eso es una ventaja para poder
trabajar con ellos”.
Héctor Barría, director del departamento de Educación de Quemchi,
señala que los buenos resultados se deben a un seguimiento constante en
los aprendizajes, a que “hay una alta expectativa de los alumnos y al
apoyo de los padres”.
“Perseverancia”
La Escuela Rural Archipiélago, ubicada en la isla de Añihué, tiene 15
alumnos de 1º a 6º básico. Dos de las niñas que allí se educan, Lorena
Miranda y Katary Saldivia, cursan 4º básico y obtuvieron un promedio de
315 puntos en el Simce.
La profesora a cargo de la escuela es Perseverancia Cárcamo, quien
nació en esa misma isla y también estudió en la pequeña escuelita de dos
salas. Allí los alumnos de los distintos niveles asisten a clases en la
misma sala, mientras que la otra se usa como biblioteca y patio en los
días de lluvia. Su nombre le hace honor a la manera en que esta mujer se
dedica a educar a los niños de una localidad tan apartada, a la que
sólo se puede acceder en lancha.
Perseverancia cuenta que las dos alumnas se sacan buenas notas y
ambas tienen un promedio de 6,1. “Soy exigente, porque quiero
entregarles las herramientas para que después puedan seguir estudiando y
les vaya bien”, dice la profesora. Y agrega que la principal
característica de las niñas es que son buenas lectoras.
Es una escuela unidocente, como muchas en Chiloé, y está inserta en
una comunidad que no supera las 200 personas, caracterizada por una vida
ligada al campo y al mar. Los niños asisten a ese establecimiento hasta
6º básico y luego deben trasladarse obligadamente a estudiar a Achao, a
dos horas de navegación, o al internado de Quicaví, al que se llega
recorriendo unos 40 minutos en lancha.
“Acá nada es fácil y por eso es un logro que a las niñas les haya ido
bien y es el resultado del trabajo que hemos desarrollado desde que
llegaron en primero básico”, enfatiza la profesora.
En la misma comuna de Quemchi hay otros dos establecimientos que
superaron la barrera de los 300 puntos. Se trata de las escuelas
Quinterquen y Morro Lobos Alto.
República de Siria
El colegio municipal más emblemático de Ñuñoa tiene cada año 150
vacantes para nuevos alumnos en Kinder. Sin embargo, la directora del
colegio, Marcia Bañados, señala que recibieron más de mil solicitudes.
Esto, debido a los buenos resultados en las mediciones, y este año no
fue la excepción: en el Simce de 2º medio promediaron 337 puntos en
Matemática y Lectura.
La directora estima que este resultado se debe a “un programa de
desarrollo que hemos estado aplicando con buenos resultados”. Este
incluye reforzamientos y trabajo intensivo en clases. Junto con este
colegio, los otros destacados en la comuna son el Augusto D’Halmar (306
puntos promedio), el Carmela Silva (303 puntos) y el colegio Lenka
Fránulic (301 puntos)