1 de Abril de 2011
Cardenal Jorge Medina: El representante de la Congregación para el Culto se refirió al caso Karadima señalando que la justicia eclesiástica funciona de forma distinta a la civil, ya que los actos homosexuales se sancionan en el derecho canónico, pero no reviste carácter de delito en el plano de la ley penal chilena.
En entrevista con Revista Caras, el religioso dijo que hoy en día el menor de edad “es alguien que no haya cumplido los 18 años. Sin embargo, y con el debido respeto a las leyes de mi país, es muy distinto un niño de ocho años o nueve años que uno de 17″.
En ese sentido, sostuvo que el actuar de Fernando Karadima es atribuible a actos de índole homosexual, ya que “un muchacho de 17 años sabe lo que hace”, apuntando a las víctimas del sacerdote.
Asimismo, llamó a comprender las diferencias que hay entre la justicia eclesiástica con la civil. “En la justicia civil los delitos están tipificados de manera distinta a la justicia eclesiástica. Por ejemplo, en la civil los actos de homosexualidad no son penados. Y en la eclesiástica, sí”, indicó Medina.
“Un cristiano bien formado sabe que la fragilidad humana hace sus picardías”, ya que “el demonio donde puede se mete. Los sacerdotes no están exentos de sus insidias”, hizo hincapié
Si un j´ven de 17 sabe lo que hace un adulto en esa época con Karadima,entonces que asuma en plenitud y sin resguardo del poder que le entraga gente como Monseñor Madina,que ha sido tan crítico en otras instancias.
ResponderEliminarPor esta razón y en virtud a su pasada juventud el señor Karadima debe ser puesto a disposición de la justicia,por parte de las autoridades de la Iglesia en Chile.
Si mal no recuerdo en otros tiempos Monseñor Medina fue tan escandalosamente crítico, respecto de las revistas de corte pornográfico en Valparaiso.¿Cuál es la razón de bajarle el perfil a la situación de tendencia homosexual de la cual se le acusa al sacerdote Karadima?
ResponderEliminar¿Por qué no aceptar el veredíco de la justicia civil en Chile?
Duduzco que Monseñor Medina avala esta conductuas de la cual se le acusa al prelado,cuando argumenta tan pbremente que un jóven a los 17 años sae lo que hace.
Entonces debo pensar que el sacerdote no sabía lo que hacía y hoy la jerarquía de la Iglesia en Chile, tapa y defiende lo indefendible.
Si Karadima acepta el juicio eclesiástico espor que reconoce que fue parte de los hechos,entonces ¿ Cuál es la diferencia de reconcer sus errores de adulto frente al mismo hecho?
Monseñor Medina pensemos en los daños psicológicos,morales y espirituales que se han cometido en este caso.
Aquí cabe ASIMIR RESPONSABILIDADES aunque tengamos cien años, no dejamos de ser cuidadanos de un país que nos rigen los tribunales de justicia.
Por lo tanto Excelentísimas autoridades de mi iglesia Católica Apostólica y Romana, aquí hay que asumir en plenitud todos los hechos que se le constaten a los ciudadanos de la nación.
La justicia divina para Karadima y sus encubridores será otra y será la definitiva con el mejor juez ,que es imparcial y que no reconocerá vestiduras.