Estudio: jóvenes voluntarios tienen mejores empleos a los 40 años

Estudio: jóvenes voluntarios tienen mejores empleos a los 40 años
Este año, la cifra de voluntarios entre los alumnos de secundaria llegó a niveles récord. Y los beneficios están comprobados: los jóvenes tienen mejores empleos y hábitos más saludables cuando adultos.

Más de 200 alumnos del Colegio San Ignacio Alonso Ovalle partieron a la Sexta Región a construir mediaguas; unos 130 del Instituto Alonso de Ercilla fueron a Lolol; al igual que 150 alumnas de los colegios SC Monjas Inglesas y Villa María, que viajaron a Melipilla.

Con ocasión del terremoto, los escolares se volcaron hacia labores de ayuda. Seis mil alumnos de enseñanza media -tres veces más que el año pasado- se inscribieron en Un Techo para Chile. A ello se suma que otros colegios, a partir de este año, decidieron darle más énfasis a la solidaridad, como el Alemán de Santiago, que apadrinará a Chépica.

Es que hoy el voluntariado se entiende como una instancia de formación: permite desarrollar habilidades blandas, como la tolerancia a la frustración, el trabajo en equipo y la resolución de problemas, que, pese a ser claves para el éxito profesional, son poco trabajadas.

Un estudio de Sergio Urzúa, de la Northwestern University, concluyó que los jóvenes que tenían más habilidades sociales durante la etapa escolar sufrían, a los 40 años, menos desempleo. Otro estudio, del mismo Urzúa, da cuenta del impacto en los sueldos: un abogado y un profesional del área de negocios que poseen autocontrol tienen 32% más de probabilidades de elevar su salario.

LO MÁS VALORADO
"Lo más difícil fue cuando no llegaron los materiales para hacer la casa. No sacaba nada con alegar, tenía que estar con una actitud positiva", dice Valentina Punpin (17), alumna del SC Monjas Inglesas, quien permaneció cuatro días en Melipilla, construyendo.

La capacidad para resolver problemas, el refuerzo de la autoestima y autoeficacia, y hasta la reducción del estrés y angustia, son algunos de los beneficios del voluntariado. Además, quienes cumplen un rol más importante, como el estar al mando de una cuadrilla, desarrollan habilidades como la persuasión y negociación. "Trabajan en problemas reales, que les hacen sentir que sus capacidades son importantes", explica Claudia Romagnoli, sicóloga de la UC.

La adolescencia sería la edad ideal para estos trabajos. Los jóvenes son más autónomos y cuestionadores y se sienten útiles. "Cuando trabajaba en Un Techo para Chile decíamos que hacíamos un doctorado en autogestión, administración, liderazgo, etc.", dice el ex coordinador de Un Techo para Chile, Sebastián Bowen.