Autor: La Tercera
EN EL marco de la segunda renovación de
convenios de la ley de subvención escolar preferencial (SEP) que entrega
recursos adicionales a los alumnos más vulnerables con el fin de
igualar oportunidades educativas, se informó que más de 600
establecimientos no cumplieron con los requisitos para renovar dichos
convenios y, por lo tanto, dejarán de recibir estos aportes. Si bien la
ley es clara en establecer las condiciones para continuar en el régimen
SEP, existe espacio para mejorar este mecanismo; asimismo, se esperaría
una labor más oportuna de la Superintendencia de Educación para evitar
que los alumnos terminen recibiendo menos recursos.
Un 8% del total de establecimientos que son parte de la SEP son los
afectados. Dicha cifra refleja que los problemas son acotados,
descartando que existan grandes dificultades para cumplir con la ley,
como algunos alcaldes han argumentado. El hecho de que la gran mayoría
de los establecimientos en falta sean municipales da cuenta de que el
sector particular subvencionado ha podido cumplir con los requisitos sin
mayores problemas.
Con todo, y bajo un contexto de un sistema de aseguramiento de la
calidad actualmente en régimen, no es razonable que existan
restricciones adicionales para el uso de los recursos SEP ni una mayor
burocracia para su rendición de cuentas. Por el contrario, se esperaría
que esos recursos avancen hacia un tratamiento similar al de la
subvención escolar regular, sin perder el foco de entregar mayores
oportunidades de aprendizaje a quienes más lo necesitan.
A su vez, parece indispensable un trabajo más oportuno por parte de
la Superintendencia de Educación para ir monitoreando a aquellos
sostenedores con mayor riesgo de cometer infracciones. Con ello se
podrían tomar acciones correctivas dentro de los cuatro años del régimen
SEP evitando que, como se verá lamentablemente el próximo año, los
mayores perjudicados sean los alumnos.
COMENTARIOS.
Leyendo esta editorial de la Tercera,nos damos cuenta que esta otra visión,tiende a buscar más mecanismos que faciliten la entrega del dinero SEP a los colegios y que " no es razonable que existan restricciones adicionales para el uso de los recursos SEP ni una mayor burocracia para su rendición de cuentas. Por el contrario, se esperaría que esos recursos avancen hacia un tratamiento similar al de la subvención escolar regular, sin perder el foco de entregar mayores oportunidades de aprendizaje a quienes más lo necesitan".
Personalmente,considero que el norte de esta ley es darle mayores oportunidades a los alumnos prioritarios ,más calidad y equidad en la educación.
Por lo anterior deberían ser más frecuentes las fiscalizaciones de estos dineros y más estrictas en que se cumpla el espíritu de la ley ,por mucho que estén en el PME o Plan de Mejoramiento Educativo,se puede aceptar que los dineros se vayan hasta para sueldos de directores o lo que no se pudo cubrir con subvención normal,lo gasten con dineros SEP.
Los parámetros para realizar los gastos deben ser claros,por ejemplo en una escuela dónde hay un alto porcentaje de alumnos preferenciales, no se puede aceptar que se gasten 3.000.000 en arriendo de cortinajes para una graduación de niños,pero sí se podría aceptar el mismo monto en una compra de ellos,así también tenemos situaciones que escapan de lo aceptable..
Hablando de fiscalizaciones poco frecuentes,llama la atención que en el listado de colegios que perdieron la subvención SEP aparezca el Politécnico Hacienda Montalbán,curioso en la medida que lleva algunos años cerrado,o es que a pesar de ello estaban percibiendo el dinero SEP los sostenedores,conocidos empresario de colegios de la familia Romo.Si esto fuese así,habla muy mal de los fiscalizadores ¿cuántos millones se le pagaron y en cuántos años a un colegio cerrado?.Curioso.
Como se ha planteado,las primeras víctimas de esta determinación serán los niños más necesitados y luego los profesores que ya estaban contratados para realizar talleres SEP, y los encargados de realizar las gestiones,los responsables de los convenios,en fin,los causantes del problema¿qué pasará con ellos?.
No podemos aceptar que los docentes paguen por la responsabilidad o mejor dicho por la irresponsabilidad de otros.
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Leyendo esta editorial de la Tercera,nos damos cuenta que esta otra visión,tiende a buscar más mecanismos que faciliten la entrega del dinero SEP a los colegios y que " no es razonable que existan restricciones adicionales para el uso de los recursos SEP ni una mayor burocracia para su rendición de cuentas. Por el contrario, se esperaría que esos recursos avancen hacia un tratamiento similar al de la subvención escolar regular, sin perder el foco de entregar mayores oportunidades de aprendizaje a quienes más lo necesitan".
Personalmente,considero que el norte de esta ley es darle mayores oportunidades a los alumnos prioritarios ,más calidad y equidad en la educación.
Por lo anterior deberían ser más frecuentes las fiscalizaciones de estos dineros y más estrictas en que se cumpla el espíritu de la ley ,por mucho que estén en el PME o Plan de Mejoramiento Educativo,se puede aceptar que los dineros se vayan hasta para sueldos de directores o lo que no se pudo cubrir con subvención normal,lo gasten con dineros SEP.
Los parámetros para realizar los gastos deben ser claros,por ejemplo en una escuela dónde hay un alto porcentaje de alumnos preferenciales, no se puede aceptar que se gasten 3.000.000 en arriendo de cortinajes para una graduación de niños,pero sí se podría aceptar el mismo monto en una compra de ellos,así también tenemos situaciones que escapan de lo aceptable..
Hablando de fiscalizaciones poco frecuentes,llama la atención que en el listado de colegios que perdieron la subvención SEP aparezca el Politécnico Hacienda Montalbán,curioso en la medida que lleva algunos años cerrado,o es que a pesar de ello estaban percibiendo el dinero SEP los sostenedores,conocidos empresario de colegios de la familia Romo.Si esto fuese así,habla muy mal de los fiscalizadores ¿cuántos millones se le pagaron y en cuántos años a un colegio cerrado?.Curioso.
Como se ha planteado,las primeras víctimas de esta determinación serán los niños más necesitados y luego los profesores que ya estaban contratados para realizar talleres SEP, y los encargados de realizar las gestiones,los responsables de los convenios,en fin,los causantes del problema¿qué pasará con ellos?.
No podemos aceptar que los docentes paguen por la responsabilidad o mejor dicho por la irresponsabilidad de otros.
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