JUSTICIA
PARA 22 MAESTRAS Y MAESTROS
DARÍO
VÁSQUEZ SALAZAR
SECRETARIO
GENERAL
COLEGIO
DE PROFESORES
Cada
día nos enteramos de acciones que en otros países serían
catalogadas de delitos, pero que en el nuestro, dado el andamiaje
jurídico montado sin escrúpulos, se permite que las empresas puedan
coludirse para exprimir los exiguos salarios y pensiones. O que
connotados empresarios y políticos tengan un maridaje permanente
para mantener los altos niveles de explotación de los trabajadores.
Y donde el cohecho se ha develado a través de la denuncia de la
emisión de boletas falsas para financiar el voto favorable de algún
parlamentario para que la empresa tal o cual acreciente sus
ganancias.
Son
acciones impropias o desprolijas, acostumbran a decir los
involucrados ante los tribunales que juzgan su actuar. Y al poco
tiempo se falla y el imputado es sobreseído o cumple pena remitida.
Así
ha ocurrido también con la mayoría de los delitos de lesa
humanidad, que en gran número permanecen sin sanción.
Es
que la impunidad y el abuso son pan de cada día.
Mucha
impotencia sentí al ver el reportaje del canal Nacional de TV
informando a la opinión pública del drama que viven 22 profesoras y
profesores que trabajan en Cerro Navia, a quienes desde el año 2012
no se les paga el bono por retiro que al que tiene derecho al momento
de terminar su función docente y jubilar.
Impotencia
porque el alcalde dijo que era responsabilidad de la Corporación
Educacional que administra las escuelas de la comuna, en
circunstancias que él mismo es el presidente de la Corporación. Más
aún, el Seremi de Educación de esta Región dijo que los dineros
fueron entregados oportunamente y que el Estado no puede entregar dos
veces los dineros.
Entonces
cada parte se atrinchera en su verdad sin tomar en consideración la
injusticia permanente a que han sometido a docentes que lo único
que anhelan es terminar su larga y dilatada trayectoria enseñando a
estudiantes en sectores de difícil desempeño.
¡Cómo
tanta insensatez ha permitido que el empleador les haya solicitado
hace tres años que se quedaran en sus casas, pero recibiendo
mensualmente el salario!
¡Cómo
tanta insensatez que por disposición legal tuvieran que volver a las
escuelas el año pasado y hasta hoy continúen asistiendo y
recibiendo el salario regularmente sin responsabilidad docente!
Si
sumamos lo pagado en salarios por el empleador en estos tres años y
medio, la cifra supera largamente el monto del bono por retiro no
pagado.
Lo
ocurrido en Cerro Navia es uno más de los múltiples problemas que
aquejan al profesorado en un sistema educacional que da igual trato a
lo privado y lo público y que desangró a la escuela pública y
consolidó a la escuela privada.
Las
autoridades ministeriales no pueden permanecer impávidas frente a
tamaño despropósito. Ellas saben perfectamente que con la debida
disposición política el problema tiene solución.
Si
así no fuera, no habrían podido de un día a otro resolver la mala
inscripción de las listas parlamentarias de un partido político de
la ex Concertación. Todo el mundo político no dudó en darle
solución inmediata. Y todo siguió marchando sobre las ruedas que
ellos le han puesto a la sociedad.
Los
profesores de Cerro Navia no pueden seguir esperando. Son personas
íntegras, que necesitan respeto por su calidad humana y profesional.
¡Ud.
Señora Adriana Delpiano, Ministra de educación tiene la palabra!
Santiago,
julio 14 de 2.016
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