Fueron dos
preguntas las que realizaron este lunes los organizadores del Movimiento
BDS (Boicot, Desinversión y Sanción contra el Apartheid de Israel
contra el pueblo palestino), en la Facultad de Derecho de la Universidad
de Chile y en la que podían votar todos los estudiantes de dicha Casa
de Estudios durante toda la jornada que se extendió entre las 10:00 y
las 19:00 horas. Ambas respuestas le otorgaron un amplio triunfo al
movimiento de Boicot contra Israel, en el que un grupo de estudiantes de
distintas facultades de la Universidad llevan trabajando desde hace
meses.
La primera pregunta decía “¿Estás de acuerdo con que no se realicen
actividades que cuenten con la participación de personeros del Estado de
Israel y/o con financiamiento de la Embajada de Israel en la Facultad
de Derecho?”. 515 personas dijeron que sí y 399 respondieron que no. Y
la segunda pregunta decía “¿Estás de acuerdo con que la Universidad de
Chile no mantenga vínculos institucionales con aquellas universidades
israelíes que contribuyen directamente con la violación de derechos
humanos del pueblo palestino?” Aquí la diferencia fue aún mayor: 582
personas dijeron que sí y 327 respondieron que no.
“Para nosotros esto marca un logro y un precedente para hacer crecer
este llamado tan necesario. Como estudiantes de la Universidad de Chile,
que se proclama como una Casa de Estudios con conciencia social,
crítica y éticamente responsable y que busca el bien social, nos parece
incongruente ser cómplices de un Estado que viola constantemente los
Derechos Humanos de un pueblo oprimido y sostiene un sistema de
apartheid, con 68 años de impunidad. La adhesión de la Facultad de
Derecho al BDS académico, es nuestro primer paso para que la Universidad
completa demuestre que el boicot académico a Israel es la vía necesaria
y legítima de presión efectiva”, señalaron representantes del
Movimiento BDS UChile.
Esta situación trajo consigo la reacción del Centro Simon Wiesenthal,
reconocida por documentar a las víctimas del Holocausto y llevar un
registro de los criminales nazis. “Debe evitarse que el fanatismo del
BDS norteamericano y europeo importe su cultura de odio a las
universidades de Latinoamérica”, señalaron según El Dinamo, y
solicitaron que dejara sin efecto el “boicot académico”.
“Quienes sostienen el boicot, acusando falsamente al Estado de Israel
de instalar un sistema de apartheid, están proponiendo combatirlo con
otro apartheid contra Israel y sus simpatizantes, tanto judíos como no
judíos”, declaró Ariel Gelblung, representante del Centro Wiesenthal
para América Latina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario