Tras el cuestionado nombramiento de Claudia Peirano como subsecretaria de Educación, la mesa ejecutiva de la Confech se refirió al tema e insistió en que el programa de la Nueva Mayoría no se ajusta a las demandas de los estudiantes, indicando que esperan que Bachelet se pronuncie “lo más pronto posible, y no el 11 de marzo”, sobre los cuestionamientos a la economista.

Melissa Sepúlveda, presidenta de la Fech, afirmó que la designación de Peirano reflejó las dudas que ellos tenían respecto al futuro de la reforma educacional, las que a su juicio surgen debido al rol de Eyzaguirre en la implementación de CAE y a la “mirada economicista” y los “conflictos de interés” que envuelven a la subsecretaria designada.
En relación a las declaraciones emitidas por Elizalde, -quien informó del respaldo de Bachelet a la futura “subse”-, Sepúlveda las calificó como “preocupantes”, ya que “hay un conflicto de interés declarado y nos preguntamos cómo va a fiscalizar a los colegios particulares subvencionados y a las universidades privadas que lucran cuando ella ya ha obtenido ganancias de la misma forma”.
Por su parte, Naschla Aburman, presidenta de la Feuc, dijo que el rol de ellos como Confech no es “descabezar a ministros o subsecretarios, sino trabajar para la reforma educacional que todos esperamos”, y añadió que “todos tenemos derecho a cambiar de opinión, pero el problema es el vínculo en materia educativa”.
Aburman señaló también que encuentra “irresponsable” por parte de Bachelet el nombramiento, apuntando a que no realizó las averiguaciones correspondientes sobre el historial de la subsecretaria, o que incluso, lo podría haber ocultarlo.
Mario Domínguez, presidente de los estudiantes de la U de Valpo, expresó que “es importante hacer un emplazamiento a Peirano e Eyzaguirre”, para conocer su posiciones respecto a la gratuidad y al lucro. “Y para que no siga pasando lo de la Universidad del Mar y de Las Américas”, sentenció.