Narayan Vila
Los estudiantes secundarios han ido respondiendo al llamado de
las asambleas coordinadoras y comienzan a debatir sobre las formas de
movilización que adoptarán durante la segunda parte del año. A nivel
nacional, ya son nueve los establecimientos “en toma” y no se descartan
nuevas ocupaciones durante los próximos días.
De forma muy incipiente, comienzan a reaparecer las sillas y
lienzos alusivos a “educación pública, gratuita y de calidad” en los
accesos de distintos establecimientos.
Ya son nueve los recintos “en toma”, siendo los liceos Darío Salas y
Almirante Riveros, en Santiago, y el Industrial A-23 de Talcahuano los
últimos en sumarse.
Juan Pablo Torres, vocero del Centro de Alumnos del Darío Salas,
indicó que el detonante de la movilización fue la detención del alumno
Jordan Riveros, registrada el martes 28 de mayo en medio del Paro
Nacional Secundario.
Según el relato del joven, cuatro personas lo subieron a un vehículo;
lo interrogaron y golpearon de manera reiterada. Posteriormente lo
trasladaron a la trigésima tercera comisaría de Macul, siendo que su
aprehensión fue en el Puente Pio Nono, en Plaza Italia.
Al igual que el resto de la tomas, las demandas internas y exigencias
de carácter nacional son parte del petitorio. “Unido al tema nacional,
la desmunicipalización y que la educación sea estatal, tenemos problemas
internos. Tenemos un comedor que alberga 200 alumnos cuando en realidad
somos 900, entonces lo principal es hacer una medida de presión, porque
no podemos tener a nuestros compañeros comiendo en el suelo”, explicó
Torres.
Los otros establecimientos que están “en toma” son los liceos Santa
Ana de Niñas de Talagante, Agrícola-Industrial de Chillán, el Centro de
Estudios e Integración Laboral Piaget de Talcahuano, El Palomar de
Copiapó, Industrial Chileno-Alemán de Ñuñoa y el Instituto Nacional, en
Santiago.
Rodrigo Jaeschke, presidente del Centro de Alumnos de este último
establecimiento, confirmó que este jueves se realizará la votación para
definir si continúan o no en toma. En caso de no ser así, el recinto se
entregaría el domingo.
El dirigente aseguró que, luego de una semana “en toma”, los acuerdos alcanzados con los otros estamentos son importantes.
“El lunes tuvimos una asamblea triestamental donde creamos una
plataforma que sirve más o menos para demostrar que los estudiantes no
somos los únicos que nos estamos movilizando y vemos los problemas al
interior de nuestro colegio, sino que también tenemos un gran apoyo de
parte del profesorado, los paradocentes y muchísimos apoderados. Ellos
se van a incluir en el petitorio, queremos generar cambios como
comunidad”, expresó el estudiante.
Moisés Paredes, vocero de la CONES, e Isabel Salgado, portavoz de la
ACES, concordaron en que las ocupaciones se irán incrementando, en la
medida que las autoridades locales y nacionales no atiendan las demandas
del movimiento estudiantil.
“Cada día son más las universidades en paro y los colegios en toma y
ese proceso es solamente el inicio de lo que van a ser las
movilizaciones en este año. Durante los próximos días van a haber nuevos
colegios en proceso de movilizaciones, como el Instituto Nacional”,
apreció Paredes.
“Después de no recibir ninguna solución el 21 de mayo nosotros
tenemos una postura clara: vamos a seguir organizándonos con
movilizaciones de todo tipo, como son las tomas y los paros”, agregó
Isabel Salgado.
Otros recintos educativos que, durante los próximos días, podrían
sumarse a esta “radicalización” de las movilizaciones, son el Internado
Nacional Barros Arana y los liceos Barros Borgoño y de Aplicación.
A nivel de enseñanza superior, el panorama no es muy distinto.
Diversas facultades de las universidades de Santiago, de la Frontera, de
Los Lagos, de La Serena y la Universidad de Chile se encuentra en toma o
paro indefinido.